Date un paseo por el Madrid de los Austrias

La capital de España sabe mirar al futuro sin olvidar de dónde viene, y el Madrid de los Austrias es el mejor ejemplo. Este barrio, que nació al calor de la corte de los Habsburgo, conserva esa esencia para mostrarte cómo era Madrid y en los siglos XVI y XVII. Durante esta dinastía se atrajo a arquitectos, comerciantes, artistas y religiosos que levantaron iglesias, plazas y palacetes que aún siguen en pie. Y tú puedes recorrerlos en un par de horas.

¿Te vienes a observar los detalles arquitectónicos y a dejarte seducir por la historia, el arte, la arquitectura y la gastronomía del Madrid de los Austrias?

Historia y arquitectura de Madrid de los Austrias

Todo empezó en 1561, cuando Felipe II decidió trasladar la corte a Madrid. Aquello cambió para siempre el destino de la ciudad. De repente, lo que era una villa castellana se convirtió en el centro del imperio. Y claro, hacía falta levantar edificios a la altura del nuevo título. Así surgieron iglesias, conventos, plazas y palacios que hoy dan forma al barrio que conocemos como el Madrid de los Austrias.

El estilo es reconocible a la primera: sobrio, con ladrillo visto, tejados de pizarra y torres con chapiteles puntiagudos. Esto vas a poder verlo en grandes puntos de interés como la Plaza Mayor o en el Palacio de Santa Cruz.

Y si te gusta la arquitectura religiosa, aquí también te vas a poner las botas con el Monasterio de las Descalzas Reales, el Monasterio de la Encarnación o la Iglesia de San Nicolás; auténticas joyas de esta época.

Zonas y calles principales de Madrid de los Austrias

El recorrido clásico empieza en la Plaza Mayor, el corazón del barrio. Es imposible no quedarse embobado mirando sus fachadas rojizas, los balcones, las arcadas y, de paso, disfrutar de su ambiente. ¡Aquí siempre hay algo! Músicos tocando, mercadillos o una mesa libre en una terraza para tomar algo. Es el sitio perfecto para comerte un bocadillo de calamares y sentarte a ver cómo es la vida en Madrid.

Desde aquí puedes seguir hacia la Calle Mayor —está llena de tiendas— y continuar hasta la Plaza de la Villa, donde todavía se respira ese Madrid de los Austrias del que estamos hablando. Las casas de los Lujanes, de Cisneros y de la Villa, con sus torres y escudos, son las que le dan a la estampa ese aire medieval.

Si sigues caminando llegarás a la Plaza de Oriente, y aquí… ¡hay para elegir! Tienes el imponente Palacio Real a un lado y la Catedral de la Almudena al otro. Las vistas son espectaculares, sobre todo al atardecer. Y justo detrás te espera el Teatro Real —otro icono de la ciudad— y el Templo de Debod, donde ver la puesta de sol es todo un espectáculo.

Los límites históricos del barrio Madrid de los Austrias también engloba zonas como La Latina, Ópera y Las Vistillas, donde vas a encontrar mercados tradicionales, miradores y terrazas.

Tours y visitas guiadas

Una de las mejores formas de conocer la zona es apuntarte a un free tour del Madrid de los Austrias. Hay muchos diferentes y la mayoría salen desde la Puerta del Sol. En dos horas te van a contar anécdotas, a enseñarte rincones secretos y a ayudarte a entender cómo fue creciendo la ciudad. Además, puedes pagar lo que quieras al final —según lo que te haya gustado—, así que es un planazo con todas las letras.

Si prefieres algo más tranquilo, también hay visitas privadas, tours nocturnos y recorridos en segway. Y si eres de los que disfrutan explorando por libre, solo necesitas un mapa y ganas de caminar. Por aquí te dejamos una guía completa para que crees tu propio itinerario y recorras el Madrid de los Austrias con toda la información histórica, curiosidades y leyendas a golpe de clic.

Restaurantes y cafeterías en las que hacer una parada

En el Madrid de los Austrias se come de maravilla. Aquí están algunos de los locales más antiguos y con más historia de la ciudad. El más famoso, sin duda, es Casa Botín, abierto desde 1725 y reconocido como el restaurante más antiguo del mundo. Aquí sirven un cochinillo y un cordero asado en horno de leña que están de vicio.

Otro clásico es la Chocolatería San Ginés, un local que está a dos pasos de la Puerta del Sol. Sus churros con chocolate son legendarios, perfectos para reponer fuerzas después de una buena caminata por el barrio.

Y si te apetece algo más elegante, ve directo al Café de Oriente, frente al Palacio Real. Tiene una terraza ideal para ver el atardecer con un café o una copa de vino en la mano.

Y por supuesto, hay decenas de tabernas, bares y restaurantes modernos que combinan ese punto tradicional del Madrid de los Austrias con nuevas propuestas.

Más cosas que hacer después de visitar la zona de los Austrias en Madrid

Cuando termines de recorrer el Madrid de los Austrias, guarda fuerzas porque la ciudad aún tiene muchos planes que ofrecerte.
Lo suyo es que visites también algún otro de los mejores barrios de Madridcomo Malasaña, Chueca o Lavapiés.

Y si tu escapada a la capital coincide con alguna de las ferias medievales de Madrid, ¡no puedes faltar! Lugares como El Álamo, Buitrago del Lozoya o Manzanares el Real se transforman por completo con mercados, música y espectáculos por las calles.

También merece la pena que disfrutes de un espectáculo de flamenco en Madrid; aunque no es la cuna de este arte, aquí se siente con la misma intensidad y hay un montón de tablaos en el centro que reciben a los mejores cantaores y bailaores del país.

Y si te apetece desconectar un poco del ruido, haz una escapada a los pueblos más bonitos de Madrid. En menos de una hora podrás estar en Chinchón o El Escorial, disfrutando de buena comida y tranquilidad.

Elige tu base ideal para recorrer el Madrid de los Austrias

Hacer una escapada a Madrid es una experiencia que se disfruta más cuando tienes un lugar que te hace sentir como en casa. Después de recorrer el Madrid de los Austrias y de perderte por sus calles, apetece volver a un sitio tranquilo, cómodo y bien situado, ¿verdad?

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